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| El look número diez, fue uno de los más impresionantes de la colección Maison Margiela Artisanal o/i 2025. |
El año pasado, se cerró con una de las noticias que más dio que hablar en el mundo de la moda: la salida de la dirección creativa de John Galliano de Maison Margiela. La espectacular colección de Alta Costura primavera-verano 2024 que presentó en París, fue el broche de oro en forma de despedida que muchos describieron como la mejor presentación del diseñador para la marca hasta la fecha. Tal fue el revuelo que se formó con la salida de John que, como era de esperar, todas las miradas estaban ya centradas en cómo se vería el debut de Glen Martens y si estaría a la altura de las circunstancias.
El pasado miércoles, durante la Semana de la moda de la Alta Costura en París, se disiparon todas las dudas. El emblemático Le Centquatre (el mismo lugar donde Margiela presentó su última colección en 2009), se convirtió en el lúgubre y teatral escenario, que daría paso a unas modelos con máscaras elaboradas con metales, joyería reciclada, plumas o tules opacos, reviviendo el anonimato definitorio de Margiela.
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| Se trata de una colección repleta de textura, formas y colores, que fusiona a la perfección el dramatismo más estético con el declive del paso del tiempo. |
Con el barroco y el renacimiento del norte de Europa como principales inspiraciones, Glenn Martens, vistió a sus modelos de esculturas góticas o fantasmas medievales, con ayuda de tapices florales, naturalezas muertas y cuero agrietado, plástico translúcido, estampados aéreos, tules florales en 3D y una espectacular corsetería.
Se trata, sin duda, de una asombrosa colección, tan dramática como concienciada con el medio ambiente. Y es que, aproximadamente un tercio de los looks, integraron materiales recuperados, como en el caso de dos abrigos de cuero, creados con más de 18 cazadoras recicladas.
