'Feísmo', el movimiento que reclama lo antiestético como sinónimo de estilo

Esta controvertida estética que promueven famosas como Rihanna o Bella Hadid, promete una libertad estilística con la que mostrar tu verdadero 'yo' sin temer a las críticas.

Look  número 25 de la colección p/v 2024 de Balenciaga.

Durante décadas, el mundo de la moda ha explotado su adoración por lo canónicamente bello y ha impulsado estéticas que constantemente buscaban la perfección. Ya sea en cuestión de estilismo, maquillaje o peluquería, si querías que la industria te concediera el título de 'la mejor vestida' de cualquier evento con cierta resonancia mediática, tenías que ceñirte a unas estrictas reglas que en ningún caso podías incumplir.

En la actualidad, cansados de ver siempre lo mismo y gracias a la divulgación de las redes sociales, todos aquellos encorsetamientos que imperaban desde las pasarelas, parecen haber llegado a su fin. Y es que, cada vez son más populares las mezclas imposibles, las prendas más sorprendentes y los looks que se alejan de la coherencia estética imperante. Unas combinaciones que más allá de pretender gustar a todo el mundo, se rigen por potenciar la personalidad del individuo sobre todas las cosas, abrazando el que es uno de los movimientos fashionistas que más éxito está teniendo en las últimas temporadas: el 'feísmo'.

Instantánea del desfile de Dries Van Noten primavera-verano 2025, editorial de Another Magazine con look de John Galliano para Margiela y maquillaje de Pat McGrath, backstage del desfile de Miu Miu otoño-invierno 2025 y dos estilismos de Bella Hadid.
Más allá de tendencias volátiles y preferencias momentáneas, el 'feísmo' tiene un largo camino recorrido en la historia del arte. Se estima que comenzó a utilizarse de manera consciente en la Edad Media, con las tan llamativas gárgolas que se posaban sobre las enormes arquitecturas de las iglesias más emblemáticas. Sus grotescas expresiones e imperfectas figuras, simbolizaban el infierno, convirtiendo así lo 'monstruoso' en un valor simbólico del mal, que servía como mensaje didáctico. En el Barroco, el pintor italiano Caravaggio, también se declinó por esta estética, apostando por la crudeza y el realismo de los cuerpos, lejos de los ideales apolíneos que otros artistas imponían en sus obras.


El 'feísmo' aboga por una estética que, lejos de querer gustar a todo el mundo, se rige por potenciar la personalidad del individuo y explorar la originalidad por encima de lo estético.


Pero no fue hasta el siglo XX cuando movimientos como el expresionismo, que deformaba los cuerpos para transmitir emociones intensas, el dadaísmo y el surrealismo, que incorporaban lo absurdo y lo antiarmónico como protesta a la lógica burguesa y el arte contemporáneo, que utiliza lo 'feo' como discurso político contra el mercado estandarizado, lograron implantar el 'feísmo' como una nueva forma de belleza. Y es que, como ya defendieran pensadores como Baudelaire durante el siglo XIX, lo que se entiende por 'feo', también puede tener un valor estético. El poeta francés, era un gran admirador de lo grotesco ya que según sus palabras: ''revela la intensidad de la vida y el misterio de la condición humana''.


Bolso estilo bolsa de basura de Balenciaga, gafas de sol lazo de Loewe y coloridas sandalias destalonadas de JW Anderson.
Y, como no, cuando un movimiento se convierte en algo tan relevante, la moda termina haciéndose eco y trasladándolo a su terreno. En las décadas de los 80 y 90, diseñadores como Martin Margiela y Rei Kawakubo, comenzaron a experimentar con prendas deconstruidas, proporciones extrañas y materiales que parecían deteriorados, rechazando el lujo tradicional y mostrando unas propuestas que cuestionaban lo que socialmente se consideraba como 'bello' o 'bonito'.

Más adelante, Miuccia Prada, se erigió como una de las modistas que declaró el 'feísmo' como sinónimo de estilo. Tanto en Prada como en Miu Miu (las dos firmas de las que es directora creativa) podemos ver claros guiños a esta estética, con curiosas combinaciones de colores, materiales y estampados, junto con  accesorios deliberadamente kitsch y de estética anticuada.


Diseñadores como Miuccia Prada o Demna Gvasalia, han logrado un éxito incuestionable a través de este movimiento, que nos hace reflexionar sobre nuestros ideales de belleza.


El 'feísmo', ha sido también una de las grandes claves del éxito de Demna Gvasalia en Balenciaga. Pese a las fuertes críticas que suscitaban todas y cada una de sus colecciones para la marca, supo cómo utilizar las redes sociales para transformar en verdaderos objetos de deseo bolsos con forma de bolsas de basura, zapatos enormes que hacían ver el pie con un tamaño desproporcionado, prendas XXL que deformaban la silueta y un sinfín de piezas que han revolucionado la moda, con un claro afán por la provocación y la crítica a la idea del lujo.

Las celebrities, han sido las precursoras que han legitimado la tendencia, transformando lo que en la pasarela se veía como algo 'demasiado arriesgado' o incluso 'antiestético', en algo completamente aspiracional. La modelo Bella Hadid, ha sido una de las figuras públicas que más ha apostado por esta idea, especialmente durante el 2022 y 2023, con unos looks de inspiración retro que estaban cuidadosamente pensados para aparentar ser descuidados y poco sofisticados.


Rihanna y Rosalía por las calles de Nueva York y Whoopi Gooldberg en la alfombra roja de los Oscar 2025, vestida de Christian Siriano.
Rihanna es otra de las estrellas que desde hace varios años se decanta por el 'feísmo' en todas sus apariciones. No importa si es en la MET Gala o incluso en la alfombra roja de los Óscar. Para ella, los clásicos vestidos de corte A con impecables encajes y pedrería, no forman parte de su vocabulario estilístico y prefiere decantarse por arriesgados diseños deconstruidos o con novedosos materiales, que combina con originales peinados y maquillajes que no dejan indiferente a nadie. 

Tal es su pasión por esta estética, que incluso existe un famoso meme en las redes sociales llamado “It’s ugly until Rihanna decides it’s not” ("Es feo hasta que Rihanna decide que no lo es") en el que podemos ver decenas de comparativas de looks de pasarela que posteriormente lleva la cantante, consiguiendo transformar lo que en principio parecía muy poco favorecedor en algo bello, con tan sólo darle su toque personal.


Celebrities como Bella Hadid o Rihanna, han sido las encargadas de legitimar la estética de lo 'feo' hasta volverlo algo aspiracional.


A día de hoy, el 'feísmo' ha llegado a nuestro armario de una manera o de otra. Lo creas o no, estoy seguro de que alguna vez has usado alguna prenda que se inspira en este movimiento. ¿Quién no tiene unos pantalones vaqueros rotos o desgastados, alguna prenda oversize, unas gafas de sol de gran tamaño o unas llamativas deportivas y un chándal que usa fuera del gimnasio?